domingo, 21 de junio de 2009
Tan Mujer!
Hoy me toca un post feminista. O mejor dicho bastante machista, pero hablando de las mujeres.
Pasa que hace unos días, un amigo me pidió consejos sobre mujeres, y luego de dar mi opinión (no me pregunten sobre qué, suelo bloquear esas cosas), me respondió:
- SOS TAN MUJER.
Claramente, no entendí a qué se refería.
En otra situación completamente diferente, un amigo me contó de sus andanzas, que incluían dejar 15 veces (sí, quince, contadas, no es una exageración de mi parte) a la misma mina en nueve meses. O decirle “Te Amo” solamente para poder acostarse con ella… que casualmente es la misma mujer. O hacerse el enfermo para irse de parranda. Y la lista sigue pero se me hace muy larga.
Un verdadero Hijo de Puta. Les juro que no encuentro otro calificativo.
A raíz de esto, me di cuenta el porqué de la frase “sos tan mujer”.
Las mujeres en general somos bastante pelotudas. Y me incluyo.
O yo solamente. No sé, ahora empecé a dudarlo.
Si nosotras somos las “dejadas”, lloramos un mes seguido, le pedimos por favor que vuelva, nos arrastramos, utilizamos frases de la índole “sin vos me muero”. Perdon?
Que dijiste? (que dije?), sin el te morís?, tiene alguna conexión extra sensorial directa con tu órganos vitales, y el día que él se vaya a vos te va a dejar de funcionar el hígado, los riñones, los pulmones, el corazón y el cerebro, todo junto y te vas a morir de un patatús?.
Dejate de joder boluda!
Ahora si nosotras tenemos que dejarlo… tomas la decisión el día 3 de enero, en la playa, tomando un daikiri con tus amigas, diciendo “es muy celoso, se viste mal, me trata mal, y en la cama es malísimo”. Perfecto. Volvés y le pegás una patada en el tujes.
Pero llegaste a Buenos Aires, y dos semanas después tus amigas te preguntan “y? lo dejaste? Que cara te puso?”. No le dijiste nada. No lo dejaste. Te dio pena. Cagaste. Lográs separarte el 6 de junio, cuando apareció un nuevo príncipe azul que seguramente desteñirá el próximo 3 enero. Y asi se mantiene el equilibrio natural.
Por otro lado está la recién separada. Él te deja, llorás cuatro días con suerte. Pero de ese llanto que se te caen los mocos, te limpiás con la remera vieja que tenés puesta, te conectás para verle los Nicks, a ver si también esta triste como vos… y esas pelotudeces que hacemos las minas.
Al quinto día llegan tus amigas y te sacan a la peluquería, a comprar ropa y todas esas pelotud… ah no, ya lo dije… bueno… Volvés a tu casa ese sábado a la tarde, después de haberte gastado todo el sueldo, y te sentís mejor.
Hasta tenés el tupé de pensar que es un idiota, que él se lo pierde, y que cuando te vea así de diosa se va a querer matar. Y ahí nomás suena el telefóno.
Si, como lo suponen, es ÉL. Y vos que haces? Le cortás el rostro? Le decis que se vaya a cagar? NO. PE-LO-TU-DA. Accedés a verlo, te dice que está arrepentido y volvés. Te va a durar lo que un pedo en un canasto, pero vos vas derechito a estrolarte la cabeza contra la pared. Jodete.
El peor ejemplo de la estupidez femenina viene a continuación. Es una mezcla entre lo que viví yo, y lo que le pasó a una amiga. Pero pasa y va a seguir pasando.
Conocés a un chongo nuevo. (sí chicas, basta de “mi chico”, es un chongo). Genial, te llevas bien, te reis, la pasas genial, y todo eso. Él te manda mensajitos de texto y vos suspirás como una idiota y pensás que no te importa que sea un mujeriego, machista, fanático del fulbo y que no le suba el agua al tanque. Pensás que hasta quiere ponerse de novio. Un día sin demasiadas explicaciones, desaparece. Vos no te preocupás demasiado y volvés a tu búsqueda del príncipe que te venga a buscar en un caballo blanco (con un focus blanco me conformo igual, eh).
Como un mes después lo encontrás. Y está todo bien, y salís y te reís, y haces todo lo que hacías con el anterior, pero este no está tan loco.
Claramente, Chongo1 se entera. Y te persigue hasta debajo de la cama. Te llama, te manda msj, te dice que estuvo enfermo de gripe porcina y dengue y por eso desapareció.
“mala suerte, te la perdiste”, le contestas….
No mentira.
Vas corriendo a lo de tu amiga, y le decís “estoy confundida”. Confundida? Se te cruzaron los cables? Te diste un golpe muy fuerte en la cabeza y no sabes en qué año estamos?, No sabes si comprarte la cartera esa que te gustó o no? Confundida de qué?
Vaaaamos! Entre el príncipe azul y el mono del rey, te vas a quedar con el mono?
Sos boluda? Con qué te drogas?
El día que nos demos cuenta de que somos el sexo fuerte, a ellos se les acaba la joda.
Piensenlo así:
- Con un escote pronunciado, podemos conseguir cualquier cosa.
- El hombre enamorado es más boludo que la mujer enamorada.
- Nostras no tenemos dudas de que nuestro hijo, es hijo nuestro.
- A él no se le van a tirar encima las minas en un boliche. A nosotras sí.
- Nosotras siempre vamos a estar con “uno mejor que el anterior”. Después de nosotras, ellos van a estar con la gorda del barrio.
Ya se que no les dije nada nuevo.
Pero capaz alguna se da cuenta, y hace justicia por todas las boludas del mundo.
Y aca abajo vienen las menciones especiales:
A Diego, que me contó sus fechorías.
A Petti que de una vez sentó cabeza.
A mi hermana que es más inteligente que yo en cuestiones amorosas.
A Maxi, que me hizo dar cuenta que soy muy mujer.
A mi hermano, que quiere ser el único hombre en mi vida.
A Mariana, que supo dar vuelta la tortilla.
A mis amigos varones, que son tan “hombres”.
A Seba, porque me hago la estrella, pero soy tierna.
A Leandro, porque soy taan mujer.
jueves, 18 de junio de 2009
Hasta Siempre!
Chau Palito! Mi negrito ignorante!
Chau Mega! El travesti mas femenino que conozco.
Chau Sabino! Viejo hinchapelotas!
Chau Dick! Y esa voz tan particular.
Chau Roberto! Puto lindo.
Chau Milagritos! Gracias por tanta magia.
Chau Martin! Snob y concheto como pocos.
Gracias por todo muchachos.
Los vamos a extrañar Muchisimo.
Pero no se preocupen. El lugar en la radio siempre va a ser suyo.
Los queremos a todos!
Gracias Fernando… Por marcarnos un camino, a los que venimos unos pasos más atrás.
Chau PUTO LINDO!
sábado, 13 de junio de 2009
La yeta, el 13, el 17 y la Mar en Coche
Si hay algo que siempre me llamó la atención es lo cabalero que es mi hermano.
(Es cabalero y no cabulero, como solía decir evidentemente, porque el Word me lo acaba de corregir)
Algunas cosas convengamos me resultan un tanto estúpidas como pasarse la sal de mano en mano. Que mierda te puede pasar por darle un condimento en la mano a otra persona? De qué manera extraña se alinearan los planetas para que a VOS, pobre ingenuo que quería morirse de hipertensión, te pase algo?
Me resulta hasta un poco egocéntrico. O sea, con TANTAS desgracias que pasan en el mundo, crees que una fuerza superior se va a concentrar en cagarte la vida solamente porque pediste que te alcanzaran la sal que estaba exactamente del otro lado de la mesa?
El Tsunami del 2004 (o 2005, no recuerdo bien), se habrá provocado porque todos al mismo tiempo se pasaron la sal de mano en mano?
O pasar por debajo de una escalera. Que puede pasarte? Tenes que tener mucha mala suerte para que justo el tipo que estaba pintando en ESA escalera, en ese momento se resbale y caiga, tipo peso muerto, encima tuyo. Y en ese sentido, quién tuvo peor suerte? Porque seguramente el pobre hombre se partió el marote contra el piso, y vos tenes un golpe nomás.
Déjense de joder.
Obvio que si a las doce de la noche, se te cruza un gato negro, menudo susto te vas a pegar. Salvo que estemos hablando de un gato con cartera y tacos altos, o de un negro caco que te venga a afanar hasta los calzones. Ahí si te entiendo, barbaro.
Cagate por andar caminando a las 12 de la noche por la calle.
O a las 7 de la mañana como me pasó a mi, pero eso lo dejo para contárselos en otro momento.
Pero, pasarte algo? Tener mala suerte? Vaaamos. Estamos grandes.
Yo tenía algunas cábalas pero las mías eran más… como decirlo… estúpidas.
Por ejemplo, me compraba una remera. Si el día que la estrenaba me iba bien (si, en ESE sentido) joya, no me la sacaba ni para bañarme. Si me iba mal… era yeta. Y lo peor de todo es que después, ese día que nada podia fallar, se me ocurría ponermela. Y seguramente, Ley de Murphy, todo lo que no podía pasarme, me pasaba.
Es por eso que ahora cada dos por tres (llueve) me ven con esa remerita verde agua que ni siquiera es mía. Pero es ropa de guerra, claramente.
Mi otra cábala son los anillos. No me los saco. Porque el día que me los saque, seguramente voy a tener un ataque de epilepsia, o me pica un mosquito con dengue o me pesco una gripe porcina. Eso si. Los anillos sin intocables.
Todo esto venía a cuento de que hoy fui a la cancha a ver a Ferro. Ganamos 3-1, partidazo. (sí una mujer que va a la cancha, pero les JURO que no hago comentarios. Miro calladita el partido).
El tema es que mi hermano es súper cabalero con los partidos. Si venís y ganamos, podes seguir viniendo.
Ahora, si venís y perdemos, cagaste. El cartel de piedra futbolístico no te lo sacas en tu puta vida, así hayas estado en la cancha el día que Argentina salió campeón.
Para Ferro, o mejor dicho, para los hinchas sos drapie.
Pero continúo con mi postura.
Si la defensa es un flan, el arquero parece clemente, al nueve te lo echaron porque le quebró la tibia y el peroné al 5 del otro equipo, y el director técnico es medio ciego, que culpa tiene el boludo, que por hacerte la gamba y acompañarte, el equipo pierde?
Y vale aclarar que no hablo de Ferro, (vamos muchachos que zafamos de la promoción)
La otra cábala es la camiseta. Yo a Ferro lo vi ascender con la camiseta que mi papá y mi hermano me habían regalado para mi cumpleaños. Algunos partidos los vi con chomba blanca con el escudito, y no me caí de la tribuna para abajo. Hoy fui vestida como una persona normal, que va a ver un partido de su equipo, y ahí tienen cabaleros. Ganamos.
Hace falta ir TODOS los partidos con la remera verde con el escudo enorme en la mitad del pecho con la que salieron campeones en el ´84?, no los vieron perder alguna vez con esa camiseta? Cuando descendimos dos veces seguidas, la había llevado a la tintorería? Y para colmo, hace falta no lavarla desde aquella vez, por las dudas?
Insisto.
HACE FALTA?
Además, muchachos, ya no tienen el físico que tuvieron en el ´84 cuando todavía se podían subir al paravalanchas sin romperse la cadera o que les duela la ciática. La remera esa les queda ajustada, se les nota la panza y no deja nada a la imaginación. Por favor, cómprense la de este campeonato y háganla bendecir, pero larguemos la del escudito grande!!!!!
Aquel lector que vió el post “Brujería, Hice Brujería”, debe estar pensando en este momento que o estoy mal del bocho, o soy una ciclotímica de mierda, o simplemente que no me acuerdo lo que escribo.
Un poquitito de esto, un poquitito de aquello diría Abe Simpson.
Lo que pasa es que me di cuenta que es una cuestión energética, o de predisposición hacia lo que viene, lo que hace que las cosas salgan bien. O mal. Depende de cómo queremos que salgan.
Y también debe tener que ver con que últimamente la gente no me chupa la energía. Y por eso me siento bien.
Seguramente, si me quiebro alguna otra parte del cuerpo, o me pesco la porcina, o me tienen que operar de urgencia porque me rompí la cabeza, cayéndome de una escalera cuando un infeliz me pasaba por abajo… volveré a decir que estoy engualichada.
Mientras tanto, volvimos a ser felices. Yo, y mi otro yo, la que cree que todo es una mierda.
Pero la YO positiva va ganando el partido. Esperemos que termine tres a uno, también. Y que Ferro se salve de la promoción.
Nota: Hinchas de Lanús, (si a vos, no te hagas el gil) absténganse de cualquier chiste futbolístico si no quieren ganarse mis golpes.
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